Boletín de Junio | Acciones y Consecuencias: Reforzando y Motivando el Comportamiento
Acciones y Consecuencias:
Reforzando y Motivando el Comportamiento
Nuestro comportamiento es la forma más visible en la que interactuamos con el mundo y con quienes nos rodean: por definición, el comportamiento abarca todo lo que decimos o hacemos. El comportamiento es también el vehículo a través del cual comunicamos nuestros deseos y necesidades y construimos relaciones con los demás. Incluso si no somos conscientes de ello, nuestros patrones de comportamiento futuros están moldeados por la forma en que nuestro comportamiento ha sido motivado y reforzado por los resultados, regresaremos a esto en un momento.
El ABC del Comportamiento
En STAR nos gusta referirnos al ABC: antecedente (lo que sucede antes del comportamiento), comportamiento (la acción) y consecuencia (lo que sucede después del comportamiento). Por ejemplo, Sam está usando una computadora, y el maestro de Sam dice: "¡El tiempo de computadora ha terminado, es hora de almorzar!" (antecedente). Sam apaga la computadora (comportamiento) y se va a almorzar (consecuencia). Fácil, ¿verdad? Si bien este ejemplo fue bastante sencillo, el comportamiento de nuestros estudiantes en el salón de clases y más allá es mucho más complicado, ¡por lo que entender qué motiva y refuerza su comportamiento puede marcar una gran diferencia!
¿Cuál es tu reforzador?
El refuerzo positivo es una herramienta poderosa para la enseñanza: los estudiantes asocian un comportamiento con obtener algo que les gusta, quieren o necesitan, lo que a su vez aumenta las posibilidades de que el comportamiento se repita. (No solo confíe en nuestra palabra: ¡el refuerzo positivo es una práctica comprobada basada en la evidencia!) Utilice esta hoja de trabajo gratuita en primaria (Inglés|Español) o secundaria (Inglés|Español), para que los estudiantes pueden completar un inventario de sus propios reforzadores preferidos.
La Práctica Hace la Perfección
Una práctica consistente y repetible de refuerzo puede ayudar a enseñar nuevos comportamientos y disminuir los desafiantes. Volviendo al abecedario: siempre comenzamos pensando en el comportamiento deseado. ¿Qué quieres que haga el estudiante? Después del comportamiento, presente un reforzador (la consecuencia), que puede ser una recompensa tangible o un evento de refuerzo. Recuerde: los reforzadores son diferentes para todos. Asegúrese de mantener nuestra hoja de Inventario de refuerzo (primaria: Inglés|Español o secundaria: Inglés|Español) disponible: es una excelente manera para que los padres, cuidadores y maestros realicen un seguimiento de diferentes refuerzos, incluyendo juguetes, alimentos y actividades que ayudan a motivar a un estudiante.
Estrategias de Motivación
Una vez que haya determinado qué refuerza a su estudiante, es hora de desarrollar la motivación para fomentar el éxito continuo. Estas son algunas de nuestras estrategias favoritas.
- Configure el Espacio: Coloque juguetes o actividades motivadoras en espacios donde quiera que el estudiante trabaje.
- Aproveche el Impulso: Comience con una tarea fácil o dominada antes de introducir una tarea nueva o desafiante.
- Provea Opciones: Ofrezca opciones claras para las tareas (p. ej., "¿Deseas colorear o cortar? Puedes usar marcadores o crayones---elige uno").
- Ajuste las Tareas Académicas: Use cuadros de tareas para organizar el trabajo y agilizar las rutinas, e incluya solo el trabajo que se haya dominado en tareas independientes.
